ANIMUS

ANIMUS es un “Centro de Atención a Hombres que ejercen Violencia contra la Pareja”, ubicado en Talca, ofrece ayuda y apoyo a los hombres que se encuentren en esta situación. 

Este centro surge por el problema social complejo que conlleva un maltrato al interior de una pareja, ya que no solo se debe trabajar con la parte agredida  sino también con la persona agresora.

 Su principal objetivo es dar las herramientas para lograr interrumpir aquellas conductas de maltrato que ocurren en las parejas, a través de terapias que se realizan en talleres psicoeducativos y acompañamientos psicosociales a estos hombres.

Existen categorías dentro del centro que se les atribuye a los hombres según el perfil que presenten:

1º Grupo: son aquellos que  presentan una conducta defensiva y  no positiva, tienden a agredir solo a la familia.

2º Grupo: son aquellos que se demuestran temerosos y afectados por la sociedad, por lo que buscan medios para expresar lo que sienten tomando conductas de posesión y siendo personas controladoras.

3º Grupo: son aquellos que presentan una conducta antisocial y agresiva con su entorno, en la familia y fuera de esta, recurren al alcohol y a las drogas en grandes cantidades.

El centro tiene un modelo de intervención para estos hombres que se conforma en 3 primeros pasos: en la primera se les hace un diagnostico y un test psicológico, en la segunda etapa asisten a talleres grupales con sus iguales y entrevistas intermedias, y en la tercera se les hace una entrevista a la pareja del beneficiario y luego una aplicación satisfacción egresa y usuario.

En este centro se trabaja con hombres de entre 20 y 55 años, que mantengan un vínculo afectivo de pareja, que sean los autores de violencias sin presentar antecedentes anteriores de violencia hacia sus parejas. Estos hombres son derivados de la red de violencia contra la mujer vinculada al proyecto, de la red judicial y de consultas espontaneas.

La iniciativa de este centro es original y muy importante, ya que con el tiempo solo se ha creado ayuda hacia las mujeres que se ven afectadas por agresiones, pero ellas no son las únicas dentro del problema tan complejo que comúnmente se ve en la sociedad. La persona que agrede es la que demuestra un problema en su actuar por lo que necesita una ayuda del tamaño de su problema, que se sienta en confianza y esperanza de salir del problema que está afectando a su vida de pareja y a su familia.